| Para poder integrar a "lápiz y papel" se
        requiere cierta experiencia con derivadas, algo de suerte y ciertas
        técnicas clásicas para integrar. Lamentablemente, muy a menudo, se
        confunde la técnica de integración con la matemática misma que trata
        sobre el cálculo de integrales (es decir, se confunde algoritmo con
        matemática). | 
    
    
      | Por alguna extraña razón estamos interesados en el
        cálculo de la integral siguiente | 
    
    
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      | La gráfica de la función f( x ) = cos
        x sen3 x entre los valores 0 y p
        es como sigue: | 
    
    
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      | De tal forma que la integral pedida corresponde al área
        bajo la curva entre los valores 0 y p.
        Pareciera una integral bastante complicada, sin embargo debemos recordar
        que | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
      | de tal forma entonces que | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
      | y por lo tanto la integral definida solicitada es | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
       | 
    
    
      | Veamos otro ejemplo: Calcular el área acotada por las
        curvas y = x / (1 + x2), y = 0, x
        = 0 , x = 2. | 
    
    
      | Lo que se pide entonces es la integral siguiente | 
    
    
      | 
          
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      | que es el área que se indica en el siguiente gráfico | 
    
    
      | 
          
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      | El cálculo de esta integral es relativamente sencillo si
        recordamos que | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
      | de modo que | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
      | y por lo tanto | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
       | 
    
    
      | En resumidas cuentas, lo que se quiere decir en esta
        sección que hay una gran variedad de funciones en la que su integral es
        casi inmediata en cuanto y en tanto seamos capaces de reconocer su
        "anti-derivada", es decir seamos capaces de determinar que la
        función que queremos integrar proviene de una derivada que conocemos.
        Lamentablemente, no siempre es así. Otras veces tenemos que acudir a
        subterfugios algebraicos que se fundamentan en un reemplazo algebraico
        adecuado (con mucha suerte) para la resolución. Veamos el siguiente
        ejemplo. | 
    
    
      | Ejemplo. Se quiere integrar la función | 
    
    
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      | Para esto acudimos a la identidad trigonométrica | 
    
    
      | 
          
  | 
    
    
      | y de este modo | 
    
    
      | 
          
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